Nancy Cardenas, guerrillera disfrazada de artista

Jueves, 14 de Septiembre de 2023
Secretaria de Cultura
Como la sonrisa que la caracterizó y con la que aparece en una gran cantidad de registros fotográficos, el trabajo de Nancy Cárdenas en la vida cultural y polÃtica de México fue formidable: no solo fue actriz, sino que también se desempeñó como dramaturga, directora de teatro, crÃtica, escritora, guionista, poeta, locutora y activista. A este último aspecto de su vida le dedicó una gran cantidad de energÃa, pues su pasión como creadora y su profundo interés por la justicia social caminaron de manera paralela a lo largo de su trayectoria profesional. Este inseparable binomio de su cualidad como artista es una de las razones por las cuales la propia Cárdenas llegó a describirse a sà misma como una âguerrillera disfrazada de artistaâ, tal como fue consignado en una entrevista de 1981:
âDe estudiante, partà de una inquietud social fuerte, como miembro del Partido Comunista, y podrÃa haber derivado en tomar un arma, pero incursioné en el arte. SÃ, lo admito, yo estoy consciente de que se haga un teatro de provocación, sigo siendo una âguerrillera urbanaâ disfrazada de artistaâ1.
La rebeldÃa que le era propia y su interés por las causas justas se vieron reflejadas en su nada pasiva actividad polÃtica. Desde su interés por convertirse en la directora de la sociedad de alumnos de la Facultad de FilosofÃa y Letras, pasando por su afiliación al Partido Comunista y su participación en movimientos estudiantiles, hasta su profundo compromiso con el movimiento de liberación homosexual y el feminismo, Nancy Cárdenas demostró que para ella lo social y lo polÃtico no estaban desligados de la creación artÃstica, convirtiéndose en un referente pionero del activismo por los derechos de lesbianas y homosexuales, y en una directora que se enfrentaba a un panorama teatral mexicano en el que las mujeres se abrÃan paso en una actividad dominada históricamente por los hombres.
Esta cercanÃa entre sus preocupaciones sociales y su actividad como creadora desembocó en diversos proyectos teatrales que hacÃan patente su visión respecto a los derechos humanos de las personas de la diversidad sexual. Uno de ellos fue el montaje de Los chicos de la banda, una adaptación de la famosa obra de Mart Crowley que fue versionada y dirigida por Nancy Cárdenas y llevada a escena en 1974 en el Teatro de los Insurgentes.
Dicha puesta en escena fue objeto de censura, pues el delegado de Cuauhtémoc en la Ciudad de México, DelfÃn Sánchez Juárez, prohibió su presentación al considerar que la obra podrÃa âdañar a personas sin criterioâ2. Ante la censura fue emitida una carta dirigida al entonces presidente Luis EcheverrÃa Ãlvarez, y firmada por cerca de 200 figuras del medio artÃstico, para exigir el ejercicio de la libertad de expresión; además, se realizó una manifestación que partió del Hotel de México con dirección al Zócalo, y en cuyas filas se hallaban figuras como Ignacio López Tarso, Carmen Salinas, Carlos Monsiváis, Tina Galindo, entre otros. Finalmente, luego de que el regente del entonces Distrito Federal, Octavio SentÃes Gómez, diera respuesta a las exigencias por la libertad de expresión, la puesta en escena se presentó.
La censura de Los chicos de la banda puso de manifiesto el conservadurismo de cierto sector de la sociedad capitalina de aquella época, y se sumó a uno de los múltiples capÃtulos de las luchas ideológicas en las que los conservadores pugnaban su deseo por silenciar e invisibilizar a los que consideraban diferentes o inmorales, pero también demostró el talante de Cárdenas por defender sus ideales y por llevar a los escenarios historias sobre las experiencias y luchas de las personas de la diversidad sexual, historias que ponÃan en evidencia el cambio ideológico y moral por el que atravesaba la sociedad mexicana en la segunda mitad del siglo XX.
âEl lesbianismo, el homosexualismo y en general todos los movimientos de las minorÃas están tomando auge porque todas esas personas quieren hacer valer sus derechos humanos para tener respeto a su preferencia sexual [â¦] ¡Me parecen sucesos maravillosos! Porque considero que sin esas luchas el siglo XX no se diferenciarÃa del siglo XIX en la cuestión moralâ3, señaló Cárdenas en una entrevista acerca de estos movimientos polÃticos.
En 1980, puso en escena Las amargas lágrimas de Petra Von Kant, de Rainer Werner Fassbinder, una historia que tenÃa por protagonistas a dos mujeres lesbianas. En 1988, en plena crisis desatada por el inicio de la pandemia del VIH, Cárdenas montó Sida⦠asà es la vida, de William Hoffman, con la cual buscó generar conciencia en torno a la discriminación que enfrentaban las personas que vivÃan con VIH. A principios de la década de 1990 montó Sexualidades, una obra escrita por ella misma en la que una vez más usaba el escenario teatral como una caja de resonancia para la reivindicación de los derechos de las personas de la diversidad sexual.
Pero la provocación que impulsaba Nancy Cárdenas no fue solo desde los escenarios del teatro o en las páginas de sus publicaciones, sino también desde el activismo. Nancy Cárdenas es considerada pionera del movimiento LGBT de nuestro paÃs, pues se convirtió en una ferviente defensora ây en la cara públicaâ de sus causas y reivindicaciones. Ella misma llegó a calificarse como âLa lesbiana de Méxicoâ4, pues su trabajo pionero y visibilidad como mujer lesbiana contribuyeron notablemente a que tuviera lugar el nacimiento del movimiento de liberación homosexual en nuestro paÃs.
A principios de la década de 1970 la casa de Nancy Cárdenas se convirtió en sede de las primeras reuniones de personas homosexuales que buscaban organizarse polÃticamente. Entusiasmada por las revueltas que se habÃan desatado a raÃz de la represión de homosexuales en el bar Stonewall en Nueva York en 1969, la coahuilense abrió las puertas de su departamento en San Pedro de los Pinos en la Ciudad de México para semanalmente albergar reuniones en las que se leÃan libros y documentos sobre la liberación homosexual5. Estas reuniones terminarÃan por conformar el Frente de Liberación Homosexual, considerada la primera organización a favor de los derechos de las personas de la diversidad sexual en nuestro paÃs.
En 1974 fue invitada a participar en el popular programa 24 Horas, conducido por Jacobo Zabludovsky, para comentar la noticia de un hombre que habÃa sido despedido de su trabajo por ser homosexual; en su intervención, Cárdenas defendió el derecho de las personas homosexuales a vivir libremente su sexualidad, y argumentó en contra de las ideas que equiparaban la homosexualidad con una enfermedad. Este hecho, considerado histórico por su falta de precedentes, fue descrito por el escritor Carlos Monsiváis de la siguiente manera:
âAceptaste la invitación de Jacobo Zabludovsky y fuiste a comentar positivamente, por vez primera en la televisión, los derechos de las minorÃas, la homosexualidad responsable, la caracterÃstica de elección libre tan opuesta a la noción de âenfermedadâ. Millones vieron el programa (incrédulos, supongo) y fui testigo en un restaurante del número de los que se te acercaban y felicitaban. Para ellos tú inaugurabas algo en México: el valor civil en materia de opciones sexualesâ6.
Asimismo, en 1975 se sumó a la firma del manifiesto Contra la práctica del ciudadano como botÃn policiaco, un texto redactado por Carlos Monsiváis y publicado en las páginas de La cultura en México, suplemento de la revista Siempre que era dirigido por el propio escritor. El principal objetivo de la publicación era denunciar la criminalización de la homosexualidad, asà como poner alto a la represión y la violencia policÃaca a la que comúnmente se enfrentaban las personas homosexuales. Además de Cárdenas, el documento fue firmado por otras importantes figuras intelectuales, artistas y escritores, como Juan Rulfo, Elena Poniatowska, José Revueltas, Manuel Felguérez, José MarÃa Pérez Gay, entre otros.
El 2 de octubre de 1978 Nancy Cárdenas formó parte de un contingente de personas homosexuales que participó en la marcha conmemorativa por los 10 años de la represión del movimiento estudiantil de 1968, esta manifestación es considerada un preámbulo de la primera marcha del orgullo LGBTI en nuestro paÃs, la cual tuvo lugar apenas un año después.
Asà como Cárdenas fue una ferviente defensora de los derechos de las personas de la diversidad sexual, no lo fue menos con el feminismo. Para ella, el feminismo era âla conciencia que adquiere la mujer al darse cuenta de que siempre ha sido sojuzgada históricamenteâ7. Y como proceso de concientización, para Cárdenas el feminismo era una especie de âiluminaciónâ, tal como lo escribió en De la conciencia feminista como un incómodo tesoro, un ensayo publicado en el número inaugural de la revista Fem en 1976. Entre otros argumentos, en dicho texto sustentaba los vÃnculos entre el movimiento de liberación homosexual y el movimiento feminista, a la vez que exponÃa el abordaje de algunos de sus trabajos teatrales desde la idea de la conciencia feminista.
âLa conciencia feminista nunca llega como un regalo. Es más bien una iluminación paulatina que se va apoderando de una persona sin que ésta pueda hacer nada por impedirlo a menos que esté furiosamente entrenada para el sometimientoâ8, escribió la directora teatral.
Como vimos la labor polÃtica y artÃstica de Nancy Cárdenas podrÃa describirse como versátil, hiperactiva, consecuente, congruente con diversas causas sociales, inagotable y, sobre todo, incansable. Su vida en el mundo del arte inició desde muy joven y desde entonces no paró: estudió la maestrÃa en Arte Dramático en la Facultad de FilosofÃa y Letras; estudio en la Universidad de Yale como resultado de una beca otorgada por la OEA; colaboró en diversas revistas escribiendo sobre cultura y polÃtica; publicó dos libros de poesÃa titulados Vuelo acordado (1971) y Cuadernos de amor y desamor (1994); dirigió Cuatro a las 11, programa sobre teatro transmitido por Televisa; colaboró como actriz en el prestigioso grupo de teatro PoesÃa en voz alta; creó y condujo en Radio UNAM el programa El cine y la crÃtica; se dedicó a la producción radiofónica e incluso apareció en fotonovelas. Además de trabajar como actriz en múltiples obras de teatro, se desempeñó como dramaturga y directora poniendo en escena obras como El efecto de los rayos gamma sobre las caléndulas, ¡Ah qué mujeres!, Lo que vio el mayordomo y Pedro Paramo, por nombrar solo algunas.
Queda hacer justicia a Nancy Cárdenas a través del ejercicio de la memoria: que su nombre, sus aportes al movimiento LGBT, su defensa del feminismo, su poesÃa, su labor por la cultura y su formidable trabajo en el teatro mexicano no se olviden y que permanezcan en la memoria como una obra que allanó el camino para futuras generaciones.
1. Picos, Luz Elena. âSoy una guerrillera disfrazada de artistaâ, El Mexicano, 1981. Consultado en: GarcÃa, Angélica. Nancy Cárdenas. Género y escena, CONACULTA / INBA-CITRU, México, 2013.
2. âAnte el presidente EcheverrÃa elevan una protesta contra la censuraâ, Esto, 15 de marzo de 1974. Consultado en: GarcÃa, Angélica. Nancy Cárdenas. Género y escena, CONACULTA / INBA-CITRU, México, 2013.
3. RamÃrez, José Luis. âNancy Cárdenas llama avance al homosexualismoâ. El FÃgaro. 17 de julio de 1979. Consultado en: GarcÃa, Angélica. Nancy Cárdenas. Género y escena, CONACULTA / INBA-CITRU, México, 2013.
4. Velázquez, Carolina. "Las sociedades de injusticia nos obligan a ser héroes: Nancy Cárdenas". La Jornada, 1 de febrero de 1993. Consultado en: GarcÃa, Angélica. Nancy Cárdenas. Género y escena, CONACULTA / INBA-CITRU, México, 2013.
5. Cfr. Cano, G. (2013, octubre 1). Recordando a Monsiváis, Gabriela Cano. Debate Feminista, 48.
6. Monsiváis, Carlos. (1994, septiembre 1). EnvÃo a Nancy cárdenas: activista ejemplar. Debate Feminista, 10.
7. RamÃrez, José Luis. âNancy Cárdenas llama avance al homosexualismoâ. El FÃgaro. 17 de julio de 1979. Consultado en: GarcÃa, Angélica. Nancy Cárdenas. Género y escena, CONACULTA / INBA-CITRU, México, 2013.
8. Cárdenas, Nancy. âDe la conciencia feminista como un incómodo tesoroâ, Fem, Vol. 1 (octubre-diciembre, 1976).